Imagínate despertar sin ruido de coches, sin prisas, sin notificaciones. Solo el sonido del viento entre los almendros y el agua del manantial que nunca se seca. Aquí, en el corazón de Andalucía, donde confluyen Álora, Cártama y Almogía, existe un lugar que redefine lo que significa vivir en paz.

Una finca que produce mientras tú descansas

20.000 kilos de almendras al año. Sí, has leído bien. Además, cuenta con una subvención anual de la PAC de 3.000€. Una propiedad que no solo es un hogar, sino una inversión inteligente y sostenible.

Naturaleza, agua y aislamiento sin renunciar a la comodidad

• Agua de sobra: pozo propio y manantial inagotable.
• Casa tradicional andaluza con techo reformado y muros anchos que mantienen una temperatura perfecta en cualquier estación.
• Paisajes de postal: a solo 100 metros de la emblemática Ermita de las 3 Cruces, con senderos interminables para pasear o hacer deporte en plena naturaleza.
• Ubicación estratégica: a solo 45 minutos del aeropuerto de Málaga y a 25 minutos del famoso Caminito del Rey, un destino imprescindible para los amantes del senderismo y la aventura.
• Acceso inmejorable: aislado sí, pero sin perder conexión con la civilización.

Una oportunidad única

Esta finca es más que una propiedad, es un estilo de vida. Un lugar donde desconectar de la locura del mundo y volver a lo esencial. Ideal para quien busca una inversión con rentabilidad agrícola y potencial turístico.

No dejes pasar esta oportunidad. Si siempre has soñado con un refugio en la naturaleza, este es el momento.

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